La tuberculosis se ha convertido en una enfermedad de la cual no muchos desean hablar ni tomar en cuenta, ¿por qué es que una enfermedad con tan alta carga de muertes a su paso no es tendencia?

Es una enfermedad transmisible, considerada una de las 10 primeras causas de mortalidad en el mundo y la principal debida a un solo agente infeccioso. Siendo los pulmones el principal órgano afectado, sabemos que podemos encontrarlo en cualquier otro órgano del cuerpo.

Numerosos esfuerzos y campañas se desarrollan a través de los años para darle un alto a esta pandemia que si merece nuestra total atención. En la actualidad, tenemos más de 10 millones de casos nuevos de tuberculosis mundialmente (90% adultos y 9% con coinfección HIV), se tiene que entender urgentemente que la tuberculosis es una prioridad sanitaria mundial.

Los determinantes socioeconómicos de esta enfermedad, incluyen los aspectos políticos, sociales y económicos que afectaran directamente a las condiciones de vida, comportamiento y acceso a la atención médica. Las personas de grupos socioeconómicos bajos tienen un mayor riesgo de tener contacto con personas con tuberculosis con o sin tratamiento, por la característica de sus hogares insalubres, carentes de servicios básicos, hacinamiento, migración, viviendas multifamiliares y falta de ventilación.

Los determinantes conductuales (alcoholismo, desnutrición, tabaco) también aumentarán el riesgo de la infección tuberculosa y contribuirá en la patogénesis de la tuberculosis. El uso de tabaco, alcohol y drogas se asociarán frecuentemente con la pobreza y el hacinamiento. El factor de riesgo más frecuentemente reportado para la tuberculosis es ser fumador activo o ex fumador, y hasta un tercio de todos los casos de tuberculosis son atribuibles al tabaquismo, de acuerdo a lo expuesto por Zellweger, Cattamanchi y Sotgiu (2015); incluso un análisis de nunca fumadores, ex fumadores y fumadores activos indicaron un aumento progresivo en la tasa de infección latente de tuberculosis (además de un mayor riesgo de tuberculosis latente y tuberculosis activa en niños expuestos al humo de segunda mano, y en adultos no fumadores en contacto cercano intradomiciliario con grandes fumadores), llegando a un incremento de 9 veces la tasa de mortalidad en fumadores con tuberculosis activa que los nunca fumadores con tuberculosis. Según lo descrito por Lin, Ezzati y Murray (2007).

Es debido a esta realidad, que se debería tomar o diseñar algún modelo de rescate dirigido exclusivamente contra la pobreza extrema y la protección social.

Escribe:

Fiorella Vicuña Serdio

Médico Neumólogo