En nuestros días y en nuestra práctica médica diaria, nos damos cuenta que los retos diagnósticos y quirúrgicos van de la mano con el avance tecnológico. Son claros los avances en diagnóstico y son sorprendentes los avances quirúrgicos en las otras subespecialidades como catarata, retina y vitreo, cornea, cirugía refractiva y glaucoma que resultan en un menor tiempo quirúrgico, mejores resultados, mayor seguridad y satisfacción en nuestros pacientes.
En nuestro medio en Cirugía Oculoplástica y Órbita, no se ha difundido tanto el desarrollo diagnóstico y quirúrgico, al ser una actividad oftalmológica especial, donde cada vez se menciona el término de manejo multidisciplinario con otras actividades médicas (otorrinolaringología, cirugía de cabeza y cuello, endocrinología, radiología, etc.) con la finalidad de optimizar el tratamiento de las diversas patologías de la órbita.
En la actualidad en nuestro país hay dos cirugías de órbita que se han modernizado con la finalidad de mejorar nuestros resultados: la cirugía descompresiva de órbita en la oftalmopatía distiroidea y la cirugía de fracturas simples y
complejas de órbita. Las indicaciones para el tratamiento quirúrgico en estas cirugías deben ser claras, en el caso de
la descompresión orbitaria en casos de urgencia (con o sin enfermedad tiroidea estable) son la neuropatía óptica compresiva, exposición corneal y glaucoma intratable, mientras que los pacientes con enfermedad tiroidea estable por más de 6 meses la indicación es cosmética, mientras que en las fracturas de órbita son el enoftalmo mayor de 2mm, diplopia en posición primaria de la mirada y compromiso mayor del 50% de la pared orbitaria afectada.
Los nuevos avances en la planificación quirúrgica mediante el empleo de nuevos equipos computarizados para el Uso de la data DICOM (Digital Imaging and Communication in Medicine) para elaborar imágenes en 3D, medir volúmenes y ofrecer mejores detalles de las imágenes de la partes blandas y óseas de la órbita y el Uso de la estereolitografía o prototipaje orbitario. Asociado a todo ello, va el desarrollo de mejores abordajes quirúrgicos por abordajes sub conjuntivales eliminando las indeseables cicatrices, conjuntamente con el Uso de nuevos intrumentos quirúrgicos como cortadores óseos ultrasónicos (Misonix, Medtron), Uso de endoscopios quirúrgicos, electrobisturí de radiofrecuencia, punta de colorado, láser de C02, y otras tecnologías que en el futuro cercano nos haran guiar nuestras cirugías por computadoras con programas tipo Brainlab que ya se utilizan en otros países.
En cirugía descompresiva de órbita siempre se ha mencionado la dificultad en conseguir resultados aceptables en nuestros pacientes, lo más importante es darse cuenta que la cirugía debe ser personalizada, puesto que las órbitas son diferentes en nuestros pacientes, en el 2009 Alexander Schramm publicaba sobre la cirugía personalizada y en el2010 publicaba también sobre el análisis volumétrico orbitario. Porque es todo esto, para poder medir adecuadamente nuestros resultados y hacerlos reproducibles, en una cirugía donde el éxito es muchas veces difícil de conseguir. Además el desarrollo de la estereolitografía orbitaria, que no es nueva, pues viene de desde los años 70, pero que últimamente con las impresoras en 3D y el Uso computarizado de la data DICOM, nos permiten modelos a escala real de la órbita que nos permiten planificar el abordaje óseo de manera más fácil y predecible conjuntamente con el Uso de nuevos aparatos para trabajar sobre el hueso, estos se Utilizan desde hace 30 años, con la motores reciprocantes y sierras sagitales hasta la actualidad con los nuevos cortadores óseos ultrasónicos que fueron presentados en los Congreso Mundial de Órbita del 201 1 por argentinos y peruanos, del aprendizaje realizado de manera multidisciplinaria con los neurocirujanos y cirujanos de cabeza y cuello que ya tenían experiencia previa, haciendo su Uso muy seguro dentro de la órbita.
Por último, la experiencia ganada nuevamente con los cirujanos de cabeza y cuello, sobre el uso de las nuevas imágenes DICOM en 3D hacen que la planificación quirúrgica sea más efectiva en el manejo de las fracturas de órbita, permitiendo «remodelar las implantes personalizados orbitarios» que la industria nos ofrece, así como el ensayo de colocación de placas y mini placas en el proceso de planificación preoperatoria mediante el prototipo hecho con la estereolitografía, que nos llevan a disminuir el número de cirugías para reparar las fracturas que muchas veces requieren más de una cirugía ante resultados poco predecibles e indeseables.
Palabras clave: cirugía descompresiva de órbita, imágenes DICOM, estereolitografía, oftalmopatía distiroidea, fracturas de órbita.
Dr. José Gabriel Velasco-Stoll
Médico Oftalmólogo, Sub Especialista en Cirugía Oculoplástica y Órbita
Jefe del Departamento de Atención Especializada
en Oculoplástica y Oncología Ocular
Instituto Nacional de Oftalmología