Gonzalo Castillo, médico traumatólogo de la Clínica Ricardo Palma, explica que las lesiones ligamentarias o los famosos esguinces de rodilla que pueden ocurrir por choques, accidentes con implementos deportivos o hechos fortuitos, pueden clasificarse por grados dependiendo de la intensidad del traumatismo: el grado 1 se caracteriza por presentar una distensión ligamentaria y una inflación. El grado 2 presenta una rotura parcial de ligamento con inflamación. Mientras que el grado 3 es la rotura casi total o total del ligamento.

La detección de un esgumce leve merece un seguimiento continuo. Castillo advierte que muchas personas que tuvieron un esguince de rodilla leve alguna vez y no se realizaron la resonancia, notan que no tienen estabilidad en la rodilla durante cualquier exigencia física.

El tratamiento para la rotura del ligamento medial o lateral consiste en la inmovilización de la rodilla por 3 0 4 semanas para luego ser acompañada por fisioterapia. La rotura de ligamento cruzado anterior siempre necesita de un procedimiento quirúrgico afirma Castillo. Es muy poco el porcentaje de pacientes que auto-reparan sus lesiones. Este tipo lesión complica la estabilidad del paciente.

Gonzalo Castillo explica que la reconstrucción del liga mento cruzado anterior consiste en reponer el ligamento roto a través de la cosecha de injertos que son del mismo paciente o también puede ser un aloinjerto proveniente de un cadáver. La rotura del ligamento posterior tiene más probabi lidades de cicatrizar de manera conservadora que el ligamento anterior. Sin embargo, si la lesión no cicatrizo también deberá ser reconstruido quirúrgicamente.

Luego de la operación, el seguimiento al paciente se da durante un año de manera bimestral. El objetivo del seguimiento es realizar una buena rehabilitación durante 5 meses para que los rangos de movilidad regresen al miembro lastimado y la desinflamación de la rodilla desaparezca. En 6 u 8 meses el injerto ya se inte gró al cuerpo del paciente , permi tiendo el desarrollo de algunas actividades físicas, asegura Castillo. En el proceso de recuperación, es vital la participación del médico, médico rehabilitador y el traumatólogo.