Desde Argentina, Mario Yarrouge comparte con Médica La Revista un extracto de
toda la experiencia que ha acumulado en sus treinta años de servicio en el Hospital
Municipal Santojanni, en el Swiss Medical Group y en la Clínica Adventista, en las que ha observado cómo ha ido evolucionado su especialidad, la cirugía de cabeza y cuello.
— ¿A qué es lo que se enfrenta principalmente un cirujano de cabeza y cuello?
Usualmente, se enfrenta a patologías neoplásicas y traumáticas. En un hospital polivalente como en el que me desempeño, lo más frecuente de ver para uncirujano de cabeza y cuello son la patología nodular de la glándula tiroides y las heridas causadas por armas de fuego, objetos cortopunzantes, agresión de terceros o accidentes en la vía pública. Respecto a la patología neoplásica, considerando siempre las variadas estructuras anatómicas de la cara y el cuello, podemos encontrar tumores diferentes con distintos requerimientos terapéuticos.
— Al ser la cara la carta de presentación de toda persona, ¿es posible reconstruir las secuelas causadas por un tumor grave en el rostro?
Conservar la función y obtener un buen resultado cosmético están directamente vinculados a la calidad de vida del paciente; sin embargo, cuanto más grave es el
defecto en el rostro más difícil es reconstruirlo con resultado satisfactorio. Hoy, el avance de la medicina y de la tecnología aplicada a la misma nos permite utilizar métodos reconstructivos más eficientes como los colgajos microquirúrgicos, que consisten en extirpar tejidos de otras partes del cuerpo para reemplazar a aquellos removidos quirúrgicamente, llevando así piel, músculo y hueso revascularizado, minimizando las secuelas causadas por un traumatismo grave o una resección quirúrgica amplia
— ¿Cuál es el papel que cumple un cirujano de cabeza y cuello en enfermedades multidisciplinares como el cáncer?
Es importante determinar el tipo de cáncer, ya que algunos requieren de la cirugía como primer tratamiento para obtener los mejores resultados con menos secuelas, pero en otras ocasiones la cirugía se usa como un método de rescate en pacientes en los que otros tratamientos como la quimioterapia no han tenido los resultados esperados. Todo el equipo oncológico interviniente deberá actuar en conjunto desde el comienzo hasta el final del tratamiento.
Entrevista realizada a:
Dr. Mario Yarrouge
Vicepresidente de la Asociación Argentina de Cirugía de Cabeza y Cuello