La tecnología ha desempeñado un papel fundamental en el campo de la obstetricia, mejorando la atención médica y el cuidado prenatal. Estos avances se han visto destacados en diferentes formas de manera positiva, dando un cuidado eficiente.
Para ampliar el tema, comencemos hablando del Doppler. Este, anteriormente se solía utilizar de manera manual. Uno se debía agachar e identificar el dorso fetal mediante maniobras de Leopold y colocar la parte más ancha del Doppler en esa área. Luego acercábamos nuestro oído a la parte externa del Doppler y podíamos escuchar el latido cardíaco. Sin embargo, ahora
contamos con el Doppler fetal electrónico, que podría describirse como un micrófono. Esta tecnología se acerca al abdomen de la gestante y nos permite escuchar el latido cardíaco de manera más clara y precisa. No solo nosotros como profesionales, sino también la gestante puede escuchar el latido, ya que el sonido se puede regular.
Esta tecnología ha simplificado y mejorado la detección de latidos cardíacos, proporcionando una experiencia más tranquilizadora. Además, el Doppler fetal electrónico permite una mayor precisión en la detección de problemas cardíacos en el feto, lo que contribuye a un cuidado prenatal más informado.
Asimismo, en el monitoreo fetal ha avanzado considerablemente en comparación con los métodos tradicionales como el estetoscopio de Pinard. En la actualidad, se utilizan transductores colocados en el útero y en el corazón del bebé para evaluar la frecuencia cardíaca fetal, la reactividad y las respuestas a estímulos. Esto permite detectar complicaciones y tomar medidas inmediatas si es necesario. El monitoreo fetal se realiza generalmente a partir de las 28-29 semanas de gestación, aunque también puede realizarse en casos de emergencia en embarazos más avanzados. La falta de reactividad fetal, la bradicardia y la taquicardia sostenida son señales de alarma que requieren atención médica para evitar complicaciones graves. En resumen, el monitoreo fetal actual garantiza la salud y el bienestar del bebé al permitir una evaluación precisa y la intervención oportuna en caso de complicaciones.
Por otro lado, en la práctica diaria de obstetricia, se ha empleado varios tipos de tecnología relacionada con los métodos anticonceptivos. A lo largo del tiempo, estos métodos han ido evolucionando y modernizando. Hablamos del implante subdérmico como una opción anticonceptiva ampliamente utilizada.

El implante subdérmico consiste en un pequeño dispositivo que se coloca en la cara interna del brazo de la mujer. Este método tiene una duración de hasta 3 años, lo que lo convierte en una forma eficaz de control de la natalidad a largo plazo. Este utiliza tecnología médica avanzada para liberar de manera controlada hormonas anticonceptivas en el cuerpo de la mujer, previniendo así el embarazo. Es importante destacar que la tecnología ha permitido mejorar la eficacia y la accesibilidad de los métodos anticonceptivos, brindando a las mujeres opciones más seguras y cómodas para controlar su fertilidad. Estos avances tecnológicos en métodos anticonceptivos juegan un papel crucial en la planificación familiar y en la prevención de embarazos no deseados.
En definitiva, los avances tecnológicos dentro de la obstetricia y métodos anticonceptivos han mejorado la calidad de la atención médica y el cuidado prenatal. La introducción de tecnologías como el Doppler fetal electrónico y los transductores para el monitoreo fetal ha permitido una detección más precisa de los latidos cardíacos del feto y la evaluación de su bienestar. Además, el uso de dispositivos como el implante subdérmico ha mejorado la eficacia y la comodidad de los métodos anticonceptivos, brindando a las mujeres opciones más seguras y duraderas para controlar su fertilidad. En conjunto, estos avances tecnológicos han contribuido a un cuidado prenatal más informado y a una planificación familiar más efectiva.
Redacción MÉDICA La Revista | Edición N°31: TECNOLOGÍA MÉDICA EN PERÚ
Artículo realizado por el Dr. Rocío del Pilar Vargas.
Lima – Perú | 2023