La pesadilla de todos los padres al momento de tener un bebé es no poder hacerlos dormir, o incluso al lograr esto, que se despierten al colocarlos en su cuna. Increíblemente, la solución es un par de números mágicos, cinco y ocho, según investigadores japoneses que realizaron experimentos con 21 madres que no podían poner a dormir a sus hijos pequeños.
Cómo funciona: caminar con su bebé durante al menos cinco minutos sin sacudidas mantendrá a su bebé tranquilo, según el estudio. Luego siéntese y sostenga al bebé durante otros ocho minutos, antes de colocarlo con cuidado sobre la cuna.
El coautor del estudio, el Dr. Kumi Kuroda, líder del equipo de la División de Comportamiento Social adjunta al Centro de Ciencias del Cerebro en el Instituto RIKEN en Saitama, (Japón), indicó que colocar al bebé dormido en la cama sin sentarse primero en silencio, durante ocho minutos completos, terminó en decepción.
El estudio publicado en la revista Current Biology examinó los efectos de cuatro conductas calmantes sobre el llanto de los bebés. Se pidió a las madres que sostuvieran al bebé mientras caminaba, que caminaran con el bebé en una carriola o en el «movimiento de cuna», manteniéndolo en una posición sentada y, finalmente, que colocaran al bebé directamente en una cuna o moisés. Los investigadores monitorizaron los latidos del corazón de los bebés y grabaron en video cada sesión para registrar y cronometrar las respuestas.
Según el estudio, sentarse y sostener a un bebé que llora no ayudó: los monitores mostraron que el ritmo cardíaco del bebé aumentó y el comportamiento continuó. No es sorprendente que poner a un bebé que llora en una cuna tampoco funcione.
El estudio mostró que solo el ejercicio calmaba al niño. En 5 minutos, todos los bebés sostenidos por las madres que caminaban dejaron de llorar, su ritmo cardíaco disminuyó y el 46 por ciento se durmió. Otro 18 por ciento se durmió en cuestión de minutos, encontró el estudio.