Un paciente de 28 años presentó un cuadro de infección bronquial recurrente, propia de la zona debido a las bajas temperaturas. Tras una recaída fue tratado por el médico encargado de la posta de salud, quien le aplicó una dosis de penicilina vía intramuscular. Al no presentar reacciones adversas, el paciente fue dado de alta. Testigos indicaron que éste retornó a sus labores como seguridad en una mina y, al cabo de unos minutos, fue a los servicios higiénicos. Luego de permanecer más de media hora en el lugar, decidieron buscarlo y lo hallaron sin vida.

Proceso legal:

Al conocer el deceso, familiares de la víctima demandaron penalmente al especialista por el delito de homicidio culposo, asegurando que cometió negligencia médica por aplicarle dicho fármaco sin realizar un examen previo de sensibilidad a la penicilina.

En tanto, y luego del peritaje de ley, el médico legista – encargado de investigar, certificar y legalizar la muerte de una persona- presentó un documento considerado como decisivo para los casos de negligencia médica, el Informe Médico Legal, en el cual se determinó como motivo de muerte, un paro cardio-respiratorio; sin embargo ante el juez indicó que no podía especificar la causa exacta. Por insistencia del mismo juez, declaró que podría tratarse de un accidente cerebro-vascular, un infarto al miocardio o una reacción alérgica a la penicilina, entre otras.

Asimismo, en su declaración ante el juez indicó no estar en la posibilidad de definir si habrían otras causas del deceso; y cuando el abogado de la defensa le solicitó confirmar si disponía de los conocimientos necesarios para realizar un Informe Médico Legal en caso de una supuesta reacción alérgica medicamentosa, éste precisó que no tenía capacitación en reacciones alérgicas ya que su especialidad era en Pediatría y Medicina Legal.

Ante la declaración, y para desvirtuar el Informe Médico Legal, la defensa del médico presentó en calidad de testigo, un perito de parte, siendo para estos casos, un neumólogo alergista, el cual sustentaría si el procedimiento se hizo apropiadamente y si era necesario someter al paciente a una prueba de sensibilidad a la penicilina de manera previa.

Éste profesional médico confirmó en el juicio oral que de acuerdo a la historia clínica del paciente y a los protocolos establecidos, el tratamiento fue el adecuado; y no era necesario aplicarle dicha prueba teniendo en cuenta las cuatro ocasiones anteriores donde había sido tratado con el mismo fármaco.

Entonces, la defensa instó al médico legista a sustentar cómo llegó a las conclusiones en el Informe Médico Legal y solicitó refutar la resolución del neumólogo alergista. Al respecto, el médico legista no logró rebatir los argumentos del perito de parte consiguiéndose probar que no era indispensable la aplicación del examen en mención.

A partir de lo expuesto y como recomendación a los profesionales médicos, el abogado Luis Arias precisó lo imprescindible de la presentación de testigos claves, representado en este caso por un profesional de primer nivel como un neumólogo con especialización en alergología, jefe de un departamento médico y docente universitario, cuyo valioso testimonio confrontó y contrarrestó al perito asignado por el juzgado.

 

Dr. Luis Arias Vergara
Asesor Legal
Instituto Nacional de Defensa Legal del Médico
(INDELMED)
Colegio Médico del Perú