Hoy en día, el no llevar un estilo de vida salu- dable está demostrando tener repercusio- nes en el aspecto urológico de los varones. Específicamente, repercusiones en el ám- bito de la salud sexual, presentando disfunción eréctil y eyaculación precoz.

La eyaculación precoz se define como el trastorno sexual masculino más común, la cual tiene una prevalencia que varía de 20-30% en los hombres que experimentan alguna disfunción sexual.

Los estilos de vida actualmente presentan cierta asocia- ción con la presencia de eyaculación precoz. Ventus y Col. identificaron que la eyaculación precoz está asociada a la poca actividad física, por otro lado, Jingjing y Col. con- cluyeron que la eyaculación precoz se encuentra asociada al tabaquismo, índice de masa corporal elevado y demás comorbilidades. Actualmente, no se conoce la prevalencia de la eyacula- ción precoz.

Existen muy pocos estudios a nivel latinoa- mericano que estudien este tema, por otro lado, en Perú se evidencia un aumento con respecto al síndrome meta- bólico, obesidad, sedentarismo y consumo de alcohol en los jóvenes, hechos que podrían estar asociados a la pre- sencia de eyaculación precoz. Es así que, en un reciente trabajo de investigación reali- zado por el Dr. Antonio Grandez, médico urólogo del gru- po médico Lima del Mar, se relacionó un estilo de vida de riesgo con el incremento de la eyaculación precoz en una población adulta joven. En este estudio, se estableció una nueva evidencia sobre la real situación de esta población económicamente activa.

Los resul tados fueron que, de 381 participantes, 347 varones (91,1%) no presentan eyacula- ción precoz, luego de resolver el cuestionario diagnósti- co de eyaculación precoz o PEDT-5 y, por el contrario, el 8, 9% (34 varones) sí presentaron síntomas de eyaculación precoz. Según los estilos de vida, de estas 381 personas, 69 personas (18,1%) se encontraban en la «Zona de peligro» , (mal estilo de vida) y 312 personas (81,9%) tienen un estilo de vida normal, pero podrían mejorar.

La prevalencia de los participantes con mal estilo de vida (zona de peligro) y presencia de síntomas de eyaculación precoz fue el 82,2% de los casos. Concluyendo así que los malos estilos de vida están asociados a la presencia de eyaculación precoz, en este grupo poblacional.

 

 

Dr. Antonio Grandez

Médico Urólogo de UROZEN, Clínica de Urología Avanzada