Las prótesis son sin ninguna duda un gran avance en lo que refiere a la tecnología médica, no solo por la parte estética, sino que mientras más avanza el tiempo, las prótesis mejoran su calidad y funcionalidad de cara al usuario. Esper Bionics busca generar una revolución en este mercado con Esper Hand, la primera prótesis de mano que aprende del usuario y mejora con el tiempo que pase con el mismo
La startup ucraniana Esper Bionics ha sido una revolucionaria en lo que respecta al mercado de las prótesis, no solo porque ha sido en las primeras en incursionar en la implementación de prótesis funcionales creadas a través de impresoras 3D, sino que han creado Esper Hand la primera mano biónica capaz de mejorar su función entre más tiempo pasa con su usuario.
Según Dymtro Gazda CEO de Esper Bionics, “La Esper Hand contiene sensores bioeléctricos. Estos permiten que las señales eléctricas generadas naturalmente por los músculos de una persona muevan la prótesis. Muchas otras prótesis utilizan esta tecnología; sin embargo, esta mano biónica agrega algo más para hacerla realmente innovadora”, aclaró el experto en microbiología.
La Esper Hand es capaz de mejorar sus funciones mediante una aplicación de teléfono que envía las entradas bioeléctricas recibidas por la prótesis a la nube. Esto permite a sus creadores estudiar y mejorar los algoritmos que traducen dichas entradas en movimientos. Principalmente, lo que esto logra es que la mano pueda “conocer” a su usuario, haciendo que su uso sea cada vez más personalizado y preciso.
Este es sin duda alguna un paso agigantado en lo que respecta al mercado de las prótesis inteligentes. Según la propia página web de Esper Bionics este producto estará disponible en el mercado a finales de este año.