El acceso de la telemedicina se ha expandido como estrategia virtual para el encuentro clínico, mediante plataformas electrónicas entre médicos y pacientes, con el fin de evitar reuniones físicas por el aumento de casos de COVID19 en el mundo.

La masificación de esta alternativa se debió porque la agencia de seguro nacional de China acordó pagar teleconsultas, puesto que, los hospitales y clínicas estaban abarrotadas. El asesor técnico de Salud Digital de la OMS, Yanwu Xu, precisó que: “Gracias a estas tecnologías, los médicos pueden consultar con más de un centenar de pacientes al día, lo que es un aumento muy significativo en el número de los casos diarios que se manejaban en el pasado”.

La extensión del alcance médico por telemedicina está revolucionando activamente el sistema de salud. Es por ello que, el 30 de marzo el gobierno de Estados Unidos, mediante los Centros de Servicios Medicare y Medicaid (CMS), otorgaron 80 servicios adicionales de telesalud para la accesibilidad interactiva de audio y video de los pacientes.

La adopción y monitorización remota de usuarios refresca los modelos de atención médica digital. Según, Trisha Greenhalgh, codirectora de la Unidad de Investigación Interdisciplinaria en Ciencias de la Salud de la Universidad de Oxford (Reino Unido), mencionó que: “Tenemos un proyecto de investigación que ha estado rastreando el uso de la videoconferencia en Escocia durante los últimos 6 meses, y en el espacio de las últimas 2 semanas hemos visto un incremento del 1000% de utilización”.

El aumento de la demanda por este servicio ha convertido a la telemedicina como la opción más segura de atención por la emegencia sanitaria de COVID19. Sin embargo, la carencia de hardware, banda ancha y recursos técnicos hacen complicados las realizaciones de teleconsultas.

La gran escala es un reto vigente para la telemedicina por las regulaciones que existen, ligados a la privacidad y seguridad del atendido. Los profesionales de la salud podrán clasificar a pacientes de riesgo para su internamiento a un nosocomio. Comprendiendo que, la atención médica virtual no alberga el tratamiento de todos los problemas de salud. La gradualidad y esfuerzos acelerarán la transformación del comportamiento de los usuarios y médicos hacia la tecnología de salud digital.