La pandemia por la COVID-19 ha dejado un estado de alerta generalizado al mundo contra cualquier tipo de enfermedad o virus de rápido contagio y la viruela del mono parece estar causando que los principales funcionarios se preparen para evitar su propagación.

El pasado 19 de mayo el ministro de salud Jorge López aseguró que, a pesar de no haber ningún caso positivo de la “viruela del mono” en territorio nacional, el sector salud iba a instar a declarar la alerta sanitaria nacional frente a esta enfermedad, por los aumentos de casos tanto en América como en Europa y África.

“Estamos declarando la alerta, la debemos estar generando a partir del día de mañana, pero en sí ya se está declarando. En nuestro país todavía no tenemos ningún caso, pero sí se está declarando la alerta para prevenir cualquier eventualidad”, señaló el ministro en sus declaraciones a la prensa.

Las medidas tomadas por el ministro a planta la duda sobre millones de peruanos sobre el origen y síntomas de la enfermedad nos lleva a la siguiente pregunta a responder ¿Qué es la viruela del mono y por qué ha causado tanto precaución a nivel mundial?

¿Cuál es el origen de la viruela del mono?

El primer caso en humanos de la viruela del mono se detectó a principios de los setentas en la República Democrática del Congo, África. Desde entonces, ha habido brotes en una decena de países africanos de escasos recursos y se ha detectado mucho más raramente fuera del continente. La enfermedad está causada por un orthopoxvirus de la familia de la viruela, la primera enfermedad erradicada por el ser humano gracias a las vacunas. Se le llama del mono porque fue descubierto en estos animales en 1958, aunque también se puede encontrar en roedores menores.

¿Cómo se contagia?

La vía principal de contagio es de animales salvajes a humanos, tanto por ingesta como contacto. Se cree que esta enfermedad no es altamente contagiosa entre humanos. Sin embargo, se ha detectado en Europa un mayor número de casos entre hombres que han mantenido relaciones con otros hombres. Por lo que se sabe, es necesario contacto estrecho, ya que se transmite por fluidos corporales (mucosas, heridas, fluidos sexuales), aunque puede haber transmisión indirecta por contacto con objetos que tengan restos de estos fluidos, que incluyen gotas de saliva o sangre.

¿Cuáles son sus síntomas?

Los síntomas son similares a los de la viruela, pero algo más leves y difíciles de detectar. Comienza con fiebre, dolores musculares y de cabeza graduales. Entre uno y tres días después de la fiebre se forman erupciones cutáneas (en la piel) que, por lo general, afectan primero al rostro y luego se extienden al resto del cuerpo. Las zonas más afectadas son la cara, manos y pies. El número de lesiones varía desde unas pocas hasta varios miles, y afectan a las mucosas de la boca, los genitales, la conjuntiva palpebral y la córnea.

En conclusión, al ser una variante de la viruela los conocimientos que se tienen son más amplios sobre otras enfermedades de su rubro como la COVID-19. La preocupación de los altos funcionarios es entendible al venir de una pandemia mundial, por lo que, a pesar de no haber casos en el país hay que mantenernos alertas.