Tras la confirmación de este hecho, China se convirtió en el primer país en aprobar una vacuna COVID-19 inhalada, allanando el camino para el posible uso de vacunas sin aguja en dicho país.

“El regulador de medicamentos de China aprobó el uso del inhalador como refuerzo de emergencia”, dijo el fabricante de vacunas (CanSino Biologics) en un comunicado el último domingo.

Según la empresa asiática, el producto, denominado Convidencia Air, contiene pequeñas partículas que brindan una buena protección en una sola atomización.

En un pequeño estudio publicado por ellos mismos en agosto, los investigadores de CanSino informaron que en las personas que habían recibido dos dosis de la vacuna CoronaVac, el refuerzo de la vacuna inhalada aumentó los niveles de anticuerpos en comparación con una tercera dosis de inyectable.

Por último, los médicos indican que estas vacunas pueden brindar más protección a las membranas mucosas de la nariz y el tracto respiratorio, donde el coronavirus normalmente ingresa al cuerpo.